Los peligros para la salud de usar zapatos inadecuados
Los zapatos pueden tener una función estética y jugar un papel esencial a la hora de expresar tu personalidad con tu ropa. Pero no debes olvidar que cumplen una función, y es la de permitirte caminar y mantenerte de pie con comodidad. Llevar un calzado inadecuado o de mala calidad puede repercutir en tu salud a corto o largo plazo, e incluso causar diversas enfermedades o dolencias. ¿Quieres conocerlas? A continuación te hablamos de la cercana relación entre salud y calzado.
Las consecuencias para la salud de un mal calzado
Veamos cuales son las afecciones más frecuentes que se padecen por utilizar un calzado inadecuado.
Metatarsalgias
Consiste en el dolor bajo los dedos de los pies, que suele estar causado por llevar tacones de más de 5 cm de altura. Por eso, es muy común en mujeres. Claro que no significa que debas renunciar a tus tacones altos, solo procurar llevarlos en periodos de tiempo cortos.
Talalgias
También conocida como fascitis plantar, se trata de la inflamación y el dolor en la planta de los pies. A todos nos puede pasar alguna vez que nos levantemos y sintamos un dolor agudo en la planta de los pies, pero si sucede a menudo, puede deberse a que utilizas un calzado que no te conviene. En ese caso, te recomendamos llevar zapatos cómodos, planos, y mantener reposo cuando te ocurra.
Juanetes
Su origen es sobre todo genético o debido a enfermedades óseas como la artritis y es frecuente en mujeres de más de 50 años. Pero un calzado inadecuado puede influir o empeorar los síntomas. Evita los zapatos rígidos si crees que puedes padecerlo, y declínate por sandalias que dejen libre la zona o zapatos de tela o tejidos elásticos.
No te preocupes si solo tienes un juanete pequeño y este no aumenta de tamaño con el tiempo. Aun así, te recomendamos evitar el calzado de tacón para prevenir su aparición o empeoramiento.
Dedos en martillo o dedos en garra
Consiste en la flexión del segundo y tercer dedo y es frecuente en mujeres que llevan zapatos altos o medias que comprimen los dedos. Evita este tipo de calzado o, al menos, utiliza uno alto pero que no comprima los dedos de los pies.
Las personas con los dedos en martillo a menudo sufren callos o llagas debido al roce. Pero no recomendamos aplicar callicidas, ya que afectan tanto al tejido sano como enfermo, por lo que pueden causar otros problemas como infecciones o úlceras.
Esguince
Los zapatos de tacón pueden hacer que se doble accidentalmente el pie y causar un esguince, que normalmente tarda meses en curarse y puede afectar a tu día a día en algo tan importante como caminar. Además, los tacones reducen la capacidad de rotación y torsión de los tobillos… así que guárdalos para cuando no tengas que caminar mucho.
Neuroma de Morton
Se trata de una degeneración de las fibras nerviosas en la zona de la planta del pie, que causa dolor, inflamación y dificultad de circulación de la sangre en la zona. Además, puede llegar a ser bastante doloroso o provocar sensación de hormigueo y ardor. Está causado por la presión que se ejerce en la misma al llevar tacones altos. Por eso es tan importante no abusar de este calzado tanto cuando se está mucho tiempo de pie como caminando.
Sesamoiditis
Es la inflamación de dos huesos situados justo bajo los dedos de los pies, donde apoyamos todo el peso al llevar tacones altos. Si la padeces, simplemente deja de llevar tacones.
Callos
Consisten en el endurecimiento de la piel en una o varias zonas del pie. Son bastante frecuentes y normalmente no hay que preocuparse. Se pueden eliminar con una piedra pómez, cremas, baños de pies o similares. Pero si vemos que persisten y llegan a resultar molestos, puede que nos estén avisando de que debemos cambiar de calzado, ya sea por el tacón o porque la forma del zapato no sea la más correcta para nuestros pies.
Inflamación del tendón de Aquiles
Al caminar con tacones se provoca una mayor tensión en el tendón de Aquiles y se acortan los músculos de los gemelos. Como podrás imaginar, si esto ocurre continuadamente acaba llevando a una inflamación que, normalmente, desaparece al dejar de utilizar tacones.
Artrosis
Aunque los factores de la artrosis son más bien genéticos y ocurren como parte del envejecimiento, usar tacones podría acelerar la aparición de artrosis en las rodillas. Pero claro… este es un efecto que se observa más adelante en la vida, por lo que solo queda prevenirlo.
En conclusión, procura llevar calzado cómodo siempre que puedas. Ya has visto la importancia para los pies que tiene llevar zapatos correctos. Aunque no vaya a afectar a tu salud un calzado de tacón si lo llevas puntualmente para una fiesta u ocasión importante, no lo lleves continuamente o para caminar mucho. ¡Recuerda que existen zapatos confortables que también son muy bonitos!